NUESTRAS historias
Únase a nosotros y escuche las historias inspiradoras de mujeres que han sido transformadas por la Fundación Obras para la Gloria de Dios. A través de nuestros diversos programas y clases, hemos sido testigos de primera mano del increíble impacto que la fe y la comunidad pueden tener en la vida de uno. Estas mujeres han superado desafíos y obstáculos, y han surgido más fuertes y resilientes que nunca. Sus historias sirven como un recordatorio del poder del amor de Dios y la importancia de apoyarnos unos a otros en nuestros viajes. No se pierda esta oportunidad de escuchar de primera mano sobre el trabajo transformador que se está realizando en nuestra comunidad. ¡Únete a nosotros e inspírate!
Aura Rosa Tamayo
Mi nombre es Aura Rosa Tamayo, y tengo 70 años. Llegué a la fundación hace más de 2 años para la gloria de Dios. Dios me llevó a la fundación a través de un anuncio en la emisora de radio Arauna Stereo.
Empecé con clases de costura donde me enseñaban a tomar medidas, hacer cubrebocas, playeras, bolsos y delantales. Allí conocí a personas maravillosas como las de Obras para la Gloria de Dios. .
Ahora, tengo mi propia máquina de coser que me fue regalada por mi Señor Jesucristo. Con mi máquina, he hecho delantales y he reparado ropa.
Durante el taller realicé bolsos y delantales, los cuales me generaron ingresos para cubrir gastos en casa
Jimena Valencia
Mi nombre es Jimena Valencia, y tengo 21 años. Llegué a la Fundación Obras para la Gloria de Dios en abril de 2022, después de ver un anuncio en WhatsApp. Inmediatamente me atrajo el hecho de que sus programas de capacitación eran para madres solteras, ya que soy una madre soltera con un hijo de 5 años. Me matriculé en varios cursos ya que no había tenido la oportunidad de trabajar antes por falta de experiencia. Estudié atención al cliente, técnicas de venta, manicura y pedicura, patronaje, diseño y sastrería.
Aprendí mucho y obtuve valiosos conocimientos. Posteriormente, me dieron la oportunidad de trabajar en el taller de emprendimiento de la fundación por las tardes, confeccionando bolsos y delantales de tela. Fue una bendición ya que pude llevar recursos económicos a casa para mi hijo y para mí. Trabajé allí durante cuatro meses.
Una cosa hermosa que aprendí en la fundación fue amar a Dios. Nunca antes había oído hablar de Él de una manera tan extraordinaria. Nunca había estado en un lugar donde me enseñaran cómo tener una relación con Jesús. Hoy soy parte de la comunidad y estoy muy agradecida por cada una de las personas que están ahí. Me abrieron su corazón y me han apoyado de una manera muy especial. Llegaron a mi vida de una manera muy especial y agradezco a mi Padre Celestial por colocarme en un lugar tan hermoso.
Martha Parra
Mi nombre es Martha Parra, tengo 44 años, soy madre soltera de 4 hijos y abuela de una preciosa niña de 2 años. Cuando conocí al Señor, Él hizo mucho en mi vida, sin duda transformándome en una nueva persona. Me ayudó a recuperar lo que el enemigo me había robado, incluida mi identidad y mi relación con mis hijos. Él reconstruyó completamente mi vida.
Me siento increíblemente bendecida y agradecida con Dios por colocarme aquí en la Fundación de Obras para la Gloria de Dios, donde ahora soy parte del equipo. Esta fundación ha sido una tremenda bendición en todos los aspectos de mi vida. Estoy muy agradecida con Dios por permitirme servir y compartir mi testimonio aquí, viendo como el Señor levanta a otras mujeres a través de mi testimonio, usando mi vida como ejemplo de que el cambio es posible y que podemos ser nuevas criaturas en Él.
Estoy profundamente agradecida con Héctor y Liz por ser un canal de bendición en mi vida, por mostrarme la plenitud del amor del Señor.